El Hollywood de los setenta en el universo de Tarantino
Recién estrenada, Érase una vez en… Hollywood nos traslada a la Meca del cine de 1969 en una historia sobre el séptimo arte con interpretaciones, dirección de fotografía y escenarios exquisitos. Además, los estilismos de Tarantino vuelven a ser una gran atracción para los amantes de la moda, que disfrutarán de un vestuario sin pretensiones pero que refleja a la perfección la esencia de la época.
Ya hemos hablado en varias ocasiones del estilismo en el cine, pero si queréis saber más y profundizar en la relevancia del vestuario en la creación de historias en la gran pantalla, el curso de Dirección Creativa y Estilismo de Workshop Experience es vuestra oportunidad de adentraros en este apasionante mundo.
La nueva película -la novena- de Quentin Tarantino narra cómo la estrella del western Rick Dalton (interpretado por Leonardo DiCaprio) tiene que adaptarse a las nuevas reglas de la industria junto a su doble Cliff Booth (Brad Pitt) y a la presencia de su nueva vecina, la prometedora actriz Sharon Tate (Margot Robbie) y de la familia Manson. La cinta, en palabras del director, es quizás su film más personal, donde se mezclan recuerdos con la representación de aquella época en la que Hollywood entró en evolución. “Yo, Los Ángeles, en 1969. Esta película soy yo. Ese es el año en que me formé como soy. Yo tenía seis años entonces. Este es mi mundo. Y esta es mi carta de amor a Los Ángeles”, así lo explica el propio Tarantino en una entrevista en la revista Esquire.
El universo de Tarantino en el vestuario
A las puertas de los años sententa, los estilismos de Tarantino en esta película son un homenaje al Hollywood del momento. Resultan de vital importancia para contextualizar el relato, como también lo han sido en gran parte de su filmografía: cómo no recordar los trajes negros de Reservoir Dogs, la camisa blanca de Mia Wallace en Pulp Fiction o el mono amarillo de La Novia en Kill Bill. Los estilismos de Tarantino crean tendencia y con Érase una vez en… Hollywood no será diferente.
El estilismo de Érase una vez en… Hollywood
A finales de los sesenta y principios de los setenta, Los Ángeles era un hervidero de aires de cambio. Las minifaldas y trajes convivían con la estética hippie y los pantalones de campana, que iban poco a poco imponiéndose en los armarios, tal y como vemos en Érase una vez en… Hollywood.
En la película, Rick y Cliff apuestan también por jerséis de cuello Perkins, gafas de aviador, botines estilo cowboy y, en el caso del segundo, por camisa hawaiana y camisetas de manga corta ajustadas. Sus cazadoras merecen una mención aparte: para las cazadoras de piel marrón de Rick se hicieron varias pruebas y el director acordó las elegidas en base al cuerpo de DiCaprio. La cazadora tejana de Cliff es una prenda clásica de la marca Wrangler y para la que Arianne Phillips, directora de vestuario, buceó en los archivos de la firma hasta dar con la perfecta. Y es que Arianne Phillips cuenta con una gran experiencia en crear estilismos con historia, fue nominada a un Oscar por En la cuerda floja y ha trabajado más de 20 años con Madonna.
Respecto a los estilismos de Tarantino para el personaje de Sharon Tate, Phillips comenta en una entrevista a Filmmaker: “Sharon Tate fue increíblemente bien fotografiada y tuvimos la suerte de contar con su hermana, Debra Tate, como consultora. También pude ver algunas de las prendas de Sharon que Debra todavía tenía. A partir de esa investigación Quentin y yo decidimos qué looks tenían más sentido para nuestra película”. Así, tanto ella, con más sofisticación, como los demás personajes femeninos, lucen minishorts, vestidos, estampados cachemir, botas altas y tops de crochet.
Así pues, los estilismos de esta película prometen quedarse en la retina del espectador e inspirar las nuevas colecciones que veremos este otoño en las calles.
